Raimund Abraham tenía una creencia: que la arquitectura es, ante todo, concepto, ideas, conocimiento. En vida no construyó tantos edificios como otros arquitectos, más prolíficos. Sus biógrafos cuentan una decena de proyectos, sobre todo edificios residenciales en Estados Unidos y en su Austria natal. Como un centro cultural en Nueva York calificado por la crítica y por sus coetáneos como lo mejor que se ha construido en Manhattan desde el Museo Guggenheim en 1959.
Abraham murió el 4 de marzo en Los Ángeles, a los 76 años, era profesor en el Southern California Institute of Architecture. Momentos antes de morir había pronunciado una conferencia. Sus últimas palabras de recomendación a sus alumnos fueron: "No necesitáis ser esclavos en las oficinas de las empresas ni uno de esos arquitectos famosos. Lo único que necesitáis es papel, lápiz y el deseo de hacer arquitectura".
Este arquitecto, nacido en 1933 en el Tirol, era un artista del concepto. Para él, el dibujo, la forma embrionaria de la arquitectura, era tan importante como el hecho de construir, ladrillo a ladrillo, para un cliente. "La arquitectura sólo se puede entender como la polaridad entre el espacio geométrico y físico, o como la colisión entre las ideas y la materia, y mientras las ideas representan la noción del infinito o, permítaseme decirlo así, lo eterno, la materia puede contemplarse como la representación simbólica de lo carnal, su presencia y su ausencia", dijo recientemente.
Sus edificios son funcionales, geométricos, sensuales, táctiles y extremadamente originales. La crítica aplaudió la inauguración en 2002 del Foro Cultural Austriaco, un rascacielos de 24 plantas, 83 metros de altura y sólo 7,4 metros de anchura. El arquitecto convirtió esa estrechez horizontal en una ventaja: añadió relieve y líneas inclinadas en vertical, concediendo volumen a la fachada. El Washington Post lo tildó de "victoria de la estrechez".
Los principios de su credo como arquitecto: "Grietas, filos, chimeneas, salientes, combatir el miedo, un amor presentido hacia los paisajes de un desierto sin árboles, el sueño de un horizonte infinito".
"EL Pais": DAVID ALANDETE 07/03/2010
Arquitectura: ¿Qué son los edificios conceptuales?
El edificio conceptual es aquel que está diseñado al detalle para cumplir las funciones necesarias de sus futuros habitantes, por lo que se trata de arquitecturas temáticas para determinado perfil de personas. Es decir, si se trata de una construcción para oficinas, serán específicamente para productoras de cine, arquitectos, profesores, abogados, médicos o analistas de sistemas, por ejemplo, adaptándose todos los departamentos a las necesidades de cada una de estas profesiones. En el caso de edificios de viviendas, existen para artistas plásticos, escritores, estudiantes, familias numerosas o solteros, por caso, con atelieres de pintura, bibliotecas de estudio pre hechas o habitaciones netamente infantiles.
La idea es desarrollar el edificio desde el plano al detalle de lo que necesitarán sus futuros habitantes. En general, se comienzan a realizar desde un pozo de inversión [se compran de antemano las unidades] porque se asegura que los clientes existen, salvo casos en que se conoce el mercado y se sabe que la demanda de este tipo de viviendas u oficinas existe.
Esto genera que los compradores no tengan que estar adaptando las unidades de acuerdo al uso que le darán, reacondicionando ambientes para convertirlos en oficinas, tirando paredes, aislando acústicamente algunos cuartos o adaptando toda la electricidad, por ejemplo.
En Europa, se usa mucho construir este tipo de edificios en los polos productivos donde se agrupan varias empresas del mismo ámbito y ya saben de antemano cuáles son las funciones y la infraestructura que necesitan en el edificio que van a ocupar, por lo que los desarrolladores son convocados con premisas claras y deben proyectar desde el plano cada servicio imprescindiblemente.
En el caso de las viviendas, es menos frecuente pero existen muchos edificios, sobre todo en los Estados Unidos, Inglaterra y Alemania, por dar unos ejemplos, donde son todas unidades acondicionadas para estudiantes, con salas de estudio que impiden la desconcentración; para escritores, con detalles de inspiración y tranquilidad; para profesores, donde los escritorios están hechos para dar clases particulares y poder vivir en el resto de la casa en forma independizada; para artistas con atelieres, etc.
Pero también existen edificios para determinadas características de sus habitantes que escapan a su ocupación, como todas unidades para solteros, para familias con más de cuatro hijos, para personas con mascotas exclusivamente o discapacitados motrices, todos acondicionados para cumplir con las necesidades de las tipicidades mencionadas.